Finca
A Viñoa

Desde el balcón del Pazo de Banga, la escritora Emilia Pardo Bazán, casada con uno de los miembros de la familia Quiroga, contemplaba el lento discurrir de los jornaleros que atendían las fincas de la familia. La escritora llamaba con razón a este Pazo “Balcón do Ribeiro”.

Desde el siglo XVII la familia Quiroga cultivaba las viñas situadas debajo del pazo, dedicando las uvas procedentes de las mismas a la producción de vinos que alcanzaron gran reconocimiento, incluido su afamado “tostado”. Hoy, a estas fincas se han sumado más de un centenar localizadas en la ladera que recibe el nombre común de A VIÑOA. Y para cada rincón de la misma una denominación: Touro, Rego do Val, Cesares, Diagares, Auroa, Pedrenza, A Retorta…

Se trata de un dominio magníficamente orientado al sur con sus dos vertientes sureste y suroeste, y enclavada en una de las laderas del valle, con una altura sobre el nivel del mar que oscila entre los 180 m. y los 380m.

La plantación se ha realizado en terrazas o “socalcos”. En el momento actual existen más de 70 socalcos en la finca. En parte de ellos se han respetado o reconstruido piedra a piedra los antiguos muros de los viñedos centenarios. Donde la inclinación de la ladera no permitía recuperar los antiguos muros se ha optado por realizar escolleras utilizando la piedra existente en la propiedad.

En la preparación de los bancales se ha tratado de respetar al máximo la tipología del suelo estableciendo una profundidad mínima de suelo de un metro y veinte centímetros con el fin de favorecer el desarrollo de las cepas.

Los tipos de suelo que se encuentran en la Viñoa son de dos tipos, fundamentalmente arenas graníticas y esquistos que afloran en superficie en algunas partes de la finca o en el subsuelo en otras.

La orientación sur recibe una gran cantidad de luz solar durante la maduración, lo que hace que sea una finca con un potencial de maduración fenólica muy importante conservando un pH bajo y una equilibrada acidez apta para vinos de guarda.

En la finca se han plantado variedades autóctonas gallegas y concretamente las de mayor potencialidad en la zona como son Treixadura, Godello, Albariño y Loureira.

Pazo
Casanova

La finca Pazo Casanova tiene una extensión de 9 hectáreas en el corazón del margen derecho del valle del río Miño, con una altitud sobre el nivel del mar de 180 m. Es una magnifica finca rodeada de un muro de piedra bicentenario, coronando el centro de la propiedad se sitúa el Pazo Casanova, edificio histórico del siglo XVIII, que perteneció a la familia Somoza y Villamarín, cuyas armas lucen en el escudo que se localiza en la fachada principal.

La orografía de esta parte del valle del rio Miño es suave y ondulada, con una preponderancia en la composición del suelo mayoritariamente de disgregación granítica, la exposición solar es sur, recibiendo una muy buena insolación que incide positivamente en la maduración optima de la uva.

A
Cerca

A Cerca es una finca ubicada en el pueblo de Fechos, con una extensión de 3 hectáreas de terreno ubicada en torno a los 380 metros sobre el nivel del mar en el margen derecho del río Miño, aquí tenemos una de las plantaciones de la variedad Treixadura más antiguas de todo el Ribeiro, con una edad media de 40 años. La finca es un pequeño Château, rodeado de un muro de piedra con más de dos siglos de antigüedad, el cual protege el dominio coronado por una Casa Grande, un palomar, un hórreo y una capilla.

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